La avena pura es apta para la mayoría de celíacos
La avena se suele incluir tradicionalmente entre los cereales dañinos para el celíaco junto con el trigo, la cebada y el centeno, pero las últimas investigaciones sobre cómo afecta la avena a los celíacos, sugiere que la mayoría de los pacientes pueden tolerar la proteína similar al gluten (avenina) que se encuentra en la avena. Sin embargo un pequeño porcentaje de personas con enfermedad celíaca, posiblemente uno de cada veinte, puede ser sensible a la avena pura, sin contaminar.
El problema con la avena
El principal problema de la avena y productos derivados para los celíacos, es que frecuentemente están contaminados con trigo, cebada, o centeno durante el proceso de elaboración (molienda), lo que lo convierte en no apto para la dieta celíaca.
Parece ser que la avena sin contaminar puede añadir variedad a la dieta celíaca e incrementar las opciones de alimentación. La avena se considera también una fuente de fibra soluble, que es útil al organismo ayudando a mantener el intestino saludable. Puede ayudar al tratamiento contra el colesterol y también ayuda a mantener estable el nivel de azúcar para los diabéticos.
Busca el sello de certificación sin gluten
Por supuesto es importante que sólo consumas la avena que venga certificada como » Sin gluten » en la etiqueta, ya que en general se suele contaminar en la molienda en lugares donde se usan otros cereales con gluten. Busca el sello de garantía de la FACE, el del fabricante o el del minorista.
En cualquier caso te recomendamos que si quieres incluir avena pura (sin contaminar) en tu dieta celíaca, hables primero con tu médico especialista para un consejo claro sobre el tema y un seguimiento adecuado.
Existe un test doméstico para detección de gluten en alimentos, incluyendo la avena. Si quieres ver nuestro artículo al respecto pincha aquí.