Hace unos años los productos sin gluten de panadería eran duros, gomosos y sin sabor, eran una de las cosas desagradables que tenían que soportar los que tuvieran sensibilidad al gluten.
Si miramos el panorama actual, en menos de una década, la escena ha cambiado mucho. Las galletas, tartas, pasteles y panes sin gluten están comenzando a rivalizar con sus homólogos tradicionales hechos con harina de trigo. Los productos horneados sin gluten se han convertido en una sabrosa alternativa, más sana, incluso para aquellos que no tienen intolerancia al gluten, ya que la harina de trigo actual, tan refinada y proveniente de plantas modificadas genéticamente, no le sienta bien a casi nadie.
En Estados Unidos, lo que había sido un nicho de mercado se ha convertido en una corriente principal de comida saludable. Esto significa que los alimentos sin gluten, una vez relegados a las tiendas naturistas y cafeterías alternativas, ahora son accesibles en supermercados, restaurantes y centros comerciales. También hay un montón de libros de cocina para ayudar a los celíacos a cocinar sin gluten. Más de 60 se han publicado sólo en 2010.
En España se ha mejorado mucho en cuanto a la accesibilidad de los productos en cadenas de supermercados. La cadena pionera fue Mercadona, que lleva por lo menos desde 2005 con una política de etiquetado ejemplar. Luego se unió Eroski, mejorando su etiquetado para alérgicos en productos genéricos de su marca propia, lo que rebaja el coste adicional de comprar productos específicos para celíacos, que suelen ser más caros.
En cuanto a los sabores hay pastelerías especializadas que están haciendo productos deliciosos sin gluten. Sólo hace falta ver las fotos que publica en Facebook la panadería de José María García en Alicante. Para ver un listado de obradores sin gluten en España, haga una búsqueda geográfica en el buscador de nuestra página, junto al mapa.
Hostelería: la asignatura pendiente
Sin duda se ha avanzado mucho en la última década, pero falta mucho por mejorar en hostelería (restaurantes, bares, cafeterías), donde todavía las opciones son pocas. Hay algunas cadenas de comida rápida que han incorporado productos sin gluten en su menú, como McDonald’s en 2011 para toda España. También la cadena T.G.I Friday tiene un menú especial para celiacos. Pero en general si se viaja por la geografía ibérica, incluyendo Portugal, la respuesta de los camareros en bares y restaurantes es muy variada. Casi un 50% muestran desconocimiento total, un 25% no saben mucho pero intentan ayudar y el último 25% lo tienen muy claro y controlan los detalles.
Entre ese 75% de los que no controlan mucho, algunos han oído hablar levemente, en la mayoría de los casos ponen interés en darte el servicio, pero realmente no sabes lo que pasa en cocina, ni cómo se transmite la información al que elabora el plato, especialmente en días de mucho ajetreo, y haces un acto de fe. Si todavía no lo es, debería ser obligatorio incluir una asignatura sobre cocinar sin gluten en las escuelas de cocina. El principal peligro es siempre la contaminación cruzada.
Si quiere saber más sobre contaminación cruzada visita nuestro artículo específico sobre el tema aquí.